Nuestros niños y niñas están en peligro por la falta de mantenimiento a los juegos infantiles en los parques de bolsillo y vecinales del distrito. Recorrí más de 200 de estos sitios y comprobé que columpios, sube y baja, escaleras y rodaderos están destrozados, no sirven para lo que fueron creados, la recreación.
Es inconcebible que un niño de año y medio de edad, haya perdido un dedo de su mano derecha por el descuido y la falta de control del Instituto Distrital de Recreación y Deporte, IDRD al no escuchar las denuncias de la comunidad, por un rodadero en mal estado ubicado en el parque Barranquillita en la localidad de Usme.
Dos meses después del accidente, esa entidad no ha respondido por la grave lesión que tendrá de por vida ese infante. ¿Cuántas tragedias tienen que pasar para que hay una respuesta clara y contundente sobre el futuro alegre y feliz de nuestros niños y niñas? Además no queda claro la inversión que está adelantando la actual administración distrital, donde los recursos para realizar el mantenimiento a los parques de la capital superan los 43 mil millones de pesos.
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